viernes, 15 de noviembre de 2019

Cada día tiene su afán


"Sabanás también es mi enemigo"

¡Hola compañeros!

Con este libro nadie tiene exceso. Ni el más tiquismiquis con las lecturas, ya que no me he tardado ni diez minutos!
Sí, el premio por record en lectura personal se lo lleva el libro "Cada día tiene su afán" de los Chilenos Víctor Ilich (texto) y Marcelo Uribe Lamour (ilustraciones).

¿Qué puedo adelantarles? Esta vez nos traen un conjunto de microcuentos con anécdotas enmarcadas en el diario vivir, fáciles de leer, entretenidos y que tienen su matriz reflexiva si uno escarba más allá del humor. Sin embargo, lo que enocntré muy interesante es la invitación que hacen a escribir. Sí, hablo de ti, lector, pues tras cada texto hay toda una página para que uno ponga "su historia". Simplemente amé eso.

Siendo un libro tan corto -a pesar de su gran altura- no me queda mucho que decir; lo recomiendo totalmente, tiene unas hermosas ilustraciones a mano de Marcelo Uribe y originales textos de la pluma, que ya conocemos, de Víctor Illich. 

Sin más, vuelvo a mi rincón para buscar la siguiente reseña, diciéndoles lo de siempre: ¡Felices lecturas para todos!

miércoles, 23 de octubre de 2019

La venganza de la reina, leyendas de Kalamar II

 
y el romance fue un cuento.


¡Hola amigos!

Espero que la vida esté siendo más amigables con ustedes, porque conmigo anda por ahí no más, para no aburrirlos lo resumiré en una palabra "Migrañas" (y sumada a todo lo que como Chilenos sabemos que está ocurriendo). Yendo al grano, hoy les traigo, cortesía de la biblioteca: La venganza de la reina", de Alberto Rojas un querubín que hace tiempo quería leer pero, no había podido pillar y finalmente ¿cómo me fue? Pues, aquí vamos:

La pirata Tramey vuelve con su tripulación del Tormenta de Fuego, ahora involucrandose sin desearlo en los conflictos políticos que protagonizan las tierras de Kardab, al tener que buscar el tesoro de unos misteriosos cofres, sin saber lo que estos contienen, menos que no son los únicos en la búsqueda. Pero el verdadero dilema viene cuando lo que había empezado como un encargo con tintes personales se vuelve totalmente personal. Todo esto, con la ambiciosa sombra de la reina de Kardab detrás, que no va a dejar que el tesoro escape de sus manos.

Personalmente y tras tanto tiempo me gustó volver a embarcarme en el Tormenta de Fuego para saber más de los tierras de Kalomaar, ya que la misma trama da pie para ello, algo que el autor aprovechó muy bien centrándose en el reino de Kardab, y dando unos guiños de los otros reinos (Marin, Sundar, Berenia, por nombrar algunos) todo gracias a la ambición política de Tardish, la reina de Kardab y una antagonista que me dejó con una sonrisa y de la que les hablaré más abajo. 

De la trama si tuviera que ponerle nota del uno al diez, la dejo con un ocho; ya que llanamente su final, aunque me entretuvo lo sentí muy abrupto y algo predecible. En general toda la historia estuvo muy buena, el autor supo introducir nuevos personajes de forma natural...es más, por poco no se roban la película. Tuvo sus momentos solemnes como la llegada a Zanya-Kor, donde el solo ingreso por la puerta de Torkán sigue poniendome algo sobrecogedor; y ni hablemos de peligros o batallas que fue la tónica principal, si hasta tardish protegida en los muros de su palacio tuvo su cuota de adrenalina; pero, con todo lo bueno, con todo el crescendo que hubo hasta el clímax, no dejo de sentir que el final fue orquestado (en especial cierta actitud... despistada de Korlam) para que Tramey fuera quien tuviese el encuentro con Tardish. Sinceramente, antes de que a Korlam le viniese el delirio creía que Tramey estaría allí, pero no sola, habría encontrado más interesante un combate de tres bandos, cada uno viendo lo suyo y quizás a último minuto una alianza entre dos de ellos... pero bueno, pasó lo que pasó.  En contraste, el remate si me gustó y es que no puedo evitarlo, me fascina cuando me dejan esos finales donde es claro qué vendrá un siguiente libro.

Entrando de lleno a los personajes, tengo que desahogarme: inicialmente eché en falta a una de mis duplas favoritas, Kerak y Rafia, que vienen a asomar la nariz tras unas cien páginas, por otra parte me ha gustado cómo en esta historia el autor combina la introducción de nuevos personajes y mantiene a los antiguos en el aire; de estos últimos rescato a Tramey: Me encantó la mezcla de audacia y prudencia que muestra.
De los nuevos personajes, sin duda Alejok y Tardish se llevan mi total atención, el primero por su curiosa lealtad y la segunda por ser una antagonista de cuidado.
Ahora bien, de Korlam tengo un pero con su actuar al final del libro, y es que... ¡No me lo trago ni con coca cola! O sea... se presenta como alguien frío y dispuesto a pagar los precios necesarios para conseguir su fin y vale, entiendo que al final el factor sorpresa te puede descolocar pero, una cosa es eso y otra regalar todas sus cartas y rendirse sin más. ¿Dónde quedó el hombre dispuesto a todo por sus fines? ¡Se lo llevaron los aliens! ¡Juro que entendí a Zarebi en sus deseos de golpearlo! (Doy un hondo suspiro...) En fin, es por esto que sentí el final de la trama un poco forzado.

Dejando ese pastelazo de lado, el libro brilla con luces nuevas y pese a ser una secuela se puede leer de forma independiente, además de la esperada acción también muestra más del mundo de Kalomaar y sus misterios, como el cubo de tres colores o la torre Zerak; las que me dejaron bien intrigada.
Así que, sin más que decir les dejo esta recomendación para leerlo y vuelvo a mi rincón en busca del siguiente libro, que ojalá también me deje con una sonrisa.

¡Feliz lectura para todos!
S.K. Seibert



miércoles, 21 de agosto de 2019

Malaluna



Para nunca más querer transformarme en nada.


¿Qué tal compañeros?

Yo estoy con una sonrisa de oreja a oreja porque les  traigo una muy buena lectura que de ya digo la recomiendo: Del Chileno José Ignacio Valenzuela, la novela de ficción llamada MALALUNA, precuela de la triología del MALAMOR. Siendo sincera, no los he leído, así que hasta podría decir que tuve suerte de empezar con este.

La historia muestra los inicios de Rosa y Rayen, las hermanas marcadas por la Malaluna y que imagino serán las protagonistas de los siguientes libros. También nos presenta a Agata, su madre y a quien le dan un papel fundamental en la novela. Siendo muy joven esta ya tiene una mente muy curiosa, alimentada por su madre (quién le ensela a sanar por medio de las hierbas) y los libros, justo dos aspectos mal vistos en una mujer. Dicha curiosidad será la que terminará atrayendo la atención del mismisimo señor feudal, lo que sólo empeorará las cosas para ella. Sin embargo, no todo es malo, enconrtará apoyo en donde menos lo espera, por no olvida las visiones recurrentes que tiene, visiones de las estrellas que amenudo la guían.

La pluma del autor es tan fluida que avance tan rápido en la lectura que les sorprendería saber hace cuanto espero poder subirla. Y el enganche, ni digamos. Este libro, se me hizo realmente corto, incluso ahora, que ya lo terminé siento que podráia tener en mis manos el que sigue y leerlo de inmediato. La descripción y el ambiente tienen muchos detalles que me dejaron meterme más en la atmosfera, si bien no siempre especifica el nombre de la ciudad o país donde estan los personajes, si te dasuna buena idea de los aspectos culturales y políticos. Dicho sea de paso, como lectora también me gustó que entremedio el autor mostrará los detalles de esos conocimientos herbologicos.

De la trama podría decir que estuvo regia, salvo por un mero punto. 
La narración fue clara, el libro tiene buena presentanción de los personajes, inició con enganche, conflictos que no siempre se resolvieron rápido (esto te mantiene más enganchado aún) como pasó con azabache y su secreto [además de traumarme un poco y cambiarme la visión-mágica del asuntillo] ¿qué puedo decir? Quedé con la curiosidad de si la planta mencionada existe o no, ja ja ja ja. Los conflictos más grandes son claros y se nota que bajo toda la atmosfera de la "predestinado" en el fondo las cosas van pasando según lo que deciden los personajes. Ahora, se estarán preguntando ¿cúal es el bendido "pero"? La respuesta es una sola palabra CLIMAX, por lo visto no hay uno solo. Aunque tiene un power y conlleva a un final que me hizo querer tener magia para invocar el siguiente libro de inmediato, pero, debo reconocer que no me molestó durante la lectura, sino que reaccioné en ello al analizar mejor. Quizás, fue aposta del autor, quizás no, pero me dio la impresión de que hubo dos climax diferentes, según los personajes y no hay uno especialmente más fuerte que otro. De todas maneras, no estoy segura de que sea tan malo, puesto que sólo me han dado más ganas de seguir avanzando en la historia.

Manteniendo la mente en los personajes, sin duda aquí son tres los protagonistas, como ya he dicho las mellizas y por otro lado tenemos a Agata. Incluso, si tengo que patear a alguien y escoger salen volando las hermanas, porque aunque tienen su conflicto y todo, siento que el libro fue más un prólogo de su historia, mientras que la madre se robó la película. Tecnicamente, la mitad de la novela fue dedicado solo a ella; amén que también estuvo en la parte de sus hijas, obviamente.

De los caracteres, me encantó como fueron presentando a esta mujer, quien, sin duda se ganó todo mi cariño y fue uno de mis personajes favoritos, sus hijas, Azabache, incluso el anónimo padre de estas, todos tienen un espacio para que se puedan entender en sus razones de ser y actuar; personalmente y quizás por lo mismo no pude odiar a Rayen, así como también me decepcioné con Azabache y su nula relación con la niña... vale, no será un pancito de Dios, pero él es el adulto y sabía lo que pasaría ¿de verdad le costó tanto ganar algo de su afecto? Mal ahí, esperaba más de él.

En fin, esta novela tiene un poco de todo: desde misterios a momentos de humor (como cierta boda que de puro recordarla me rio sola). Así pues, la recomiendo totalmente a cualquiera que desee una buena lectura, el único riesgo es que pueden terminar deseando tener los otros tres a la mano inmediatamente.
Sin más, vuelvo a mi rincón, a ver si puedo mejorar y subir prontamente la siguiente reseña en lista.
¡Felices lecturas a todos!

S.K. Seibert


martes, 13 de agosto de 2019

Próximamente

 
¡Queridos contertulios!

¿Qué tal estan?
Sí, lo sé. De nuevo he desaparecido del mapa como abdusida por aliens, pero no, estoy viva, coleando y en la tierra.


Les contaré que la salud no me ha acompañado mucho, razón por la que no he podido subir las reseñas como quisiera.
Los libros que ven en la fotos son los que están en el horno, iré subiendo de a poco, a medida que consiga apoyo o la salud mejore.

Les adelanto que de los cuatro "Mala luna" es uno de mis favoritos e irónicamente el que más me costó reseñar.

Como no quiero dar muchos guiños, dejo los comentarios para las reseñas. Si quieren alguna de las reseñas primero pueden dejarlo en los comentarios para tipear primero.

Nos leemos!!!
Felices lecturas para todos!

Tenemos aquí cuatro buenos libros que quiero compartir con ustedes, muylindas portadas (aunque uno no pueden verlo ya que lo devolví a su legítimo dueño -biblioteca-). 


jueves, 17 de enero de 2019

En contra del Destino

Me cayó más de una teja



¡Hola a todos!

     Luego de un buen lío con los tiempos -gajes de estar en una pega absorbente- me encuentro al fin contándoles cómo me fue con el libro del día: “En contra del destino” de la estadounidense Amy Tan. Una biografía que me sorprendió de muy buena forma, dándome qué pensar en ciertos aspectos.

    Para empezar y tragándome el resumen, que como buena biografía sabemos tratará la vida de la autora, diré que no me esperaba su estilo. Pues, más que ser un estructurado esquema, es un grupo de reflexiones que la autora escribió en distintos momentos de su vida -hay uno que fue hecho a los ocho años incluso-mostrando sus sentimientos e ideas al respecto y sí, también hay un espacio dedicado al proceso de su libro “El Club de la Buena Estrella”, visto tras bambalinas. Me gustó la independencia de los textos: yo los leí en el orden del libro, pero estoy segura que los capítulos podrían leerse en desorden y no sería gran drama... la única excepción sería la última parte, esa sí quedó de perilla para el final.

     La lectura fue más rápida de lo que creí. Si no fuera por la pega seguro lo habría terminado en dos tardes. Adoré su frescura, fue como si en vez de un libro tuviera a la misma Amy Tan frente mío contándome las cosas. Y ni hablemos de esa sutil ironía que la acompaña y me sacó más de una carcajada: lo de Fred y su séquito de ardillas, lo de las “muchas Tan” que pululan en internet, son algunos momentazos que no olvidaré fácilmente, pero mi anécdota favorita sin duda fue la del fantasma alojado en el computador, incluso ahora me rio imaginando la situación.

     Por otro lado y como hace rato no me pasaba, admito que me llegaron algunas de sus experiencias, como la relación con su madre, en lo que todavía me pregunto si la revelación que tuvo la autora al final sería aplicable de algún modo en mi caso, o lo de sus mudanzas de infancia, como lo muestra esta cita con la que me reí de lo mucho que me identifiqué: “Al acabar el instituto había asistido a once escuelas. Había aprendido a perder amigos, a ser una solitaria hasta que conseguía trabar nuevas amistades”... y como fato freak, agrego que es el primer caso que escucho donde me superan con las escuelas. Como bien diría un amigo de mi mamá “todo pasa para algo” no sólo me llegó, también me sirvió como reflexión en varios detalles al respecto. Y si nos ponemos más místicos, el que me haya encontrado el libro en una reunión familiar, de pura copuchenta viendo los libros de mi tía... ¿será un mensaje, Señor?

     Me resultó muy curioso cómo a través de inocentes vivencias la autora muestra interesantes observaciones sobre la fe y el destino -cosas que la marcaron de chica- y cómo ya de mayor, en el fondo aprende que aunque puedan haber cosas “escritas” en la vida, no están en piedra, siendo más importante la propia actitud frente a los conflictos de la vida. Ella misma dice considerarse afortunada, y yo encuentro que ha tenido grandes complicaciones -en su círculo familiar sobretodo- pero también, como justo equilibrio, la vida le ha mostrado su magia en muchas otras cosas, como su amistad con Pete, cuya experiencia onírica me recordó otros casos que he sabido, además que su nexo con la actual carrera de escritora lo encontré sencillamente, de película.

    Para andar cerrando las ideas, confieso que cuando supe que sería biográfico no me entusiasmó mucho esta lectura, pero ahora puedo decir que este libro rompió con mi prejuicio de que las biografías no son tan entretenidas, vale que no es un género que vea mucho... y ahora le tengo más curiosidad. Así que sí, recomendado totalmente para... cualquiera, tanto si quieres sólo divertirte, como saber de la autora o incluso tener una lectura más reflexiva, aquí hay un poco de todo y ¿quién sabe? Quizás te pase como a mí y recibas tips inesperados a tus propios problemas.

 Sin más vuelvo a mi rincón, a seguir leyendo mientras no hayan clientes
¡Feliz lectura para todos!
S.K. Seibert.

lunes, 24 de diciembre de 2018

Recuerdos en Versos y Poemas

Recordaré esto
tejiendo mi cesto,
pensando en ti Rosa,
bella y gorda como una osa



¿Cómo están amigos?
   Acabo de tomar mi pastilla para la tolerancia, porque sí, tropecé en mi rincón con otro libro de ésos que me tientan de ver si les nacen alas al arrojarlos por la ventana. ¿El causante de mi migraña? Recuerdos en versos y poemas, del chileno Víctor Manuel Godoy.


   Como advierte el nombre, es un poemario, en su mayoría dedicado al amor. Es un libro pequeño que bien puede leerse en una tarde y… vale, siempre he dicho que la poesía no es mi área; no soy la más experta en versos, rimas y demases, pero si hasta yo siento que algo está haciendo ruido… Houston, tenemos un problema.


   Lo siento, intento pensar en algo bueno y… tal vez lo único que pueda rescatar son los tres o cuatro poemas que no hacen referencia al amor, por variar el tema. Pero, aparte de aferrarse al amor en sus poemas -un aspecto de por sí, bien manoseado en el área- también me encontré con algunas faltas ortográficas del tipo “harbol”... y a mi gusto, lo más complicado: la poca originalidad a la hora de hacer los poemas. Ok, no pido obras magnas pero, encontrarme con algo como esto: “el agua se las llevó a sus fosas, mis flores y tus flores eran hermosas, se llevó los corazones tu nombre y la flor, lo que no se llevará es mi amor” … y en la estrofa anterior pillar “dibujé para ti unas flores hermosas”... Mejor llamo a un jardinero para podar tanta planta.


  Sin querer tirar saña, debo reconocer que en casi todos los poemas al menos una vez se dijo “rosa, hermosa, mariposa, flor”... Bien, tendré suerte si sólo fue una. ¿Van entendiendo el lío? Con tanta variedad de palabras y sinónimos, el autor repitió como loro las mismas; ¿y las más comunes encima?....
   Puedo aceptar que se empeñen en hablar del amor, también que hayan faltas ortográficas (ahí se echa en falta la editorial, que por lo visto no hubo en este libro) pero, si no hay creatividad… no, simplemente no. Out, fuera… ¿a otra cosa, mariposa?


No hay mucho más por decir, y no, no lo recomiendo. Si igual quieren leer, advertidos están.


¡Felices lecturas para todos!
(y mejores ojalá)


S. K. Seibert







sábado, 15 de diciembre de 2018

Viento Salvaje

Los tratos que se hacían en esos años


¡Hola amigos!

    Tras una visita inesperada de migraña, que digamos me tuvo ocupada todo un día, les traigo la siguiente lectura: el segundo libro que leo de la autora estadounidense Patricia Ryan, así que ya puedo esperar un ambiente de época medieval y su cuota de romance. Sin más, les cuento cómo me fue con “Viento Salvaje”.

    Esta vez la historia nos muestra el dilema de Nicolette de Saint Clair, quien tras haberse casado para recibir su herencia, debe saber tener un heredero si quiere conservarla, pero hasta la fecha eso no ocurre y su esposo está muy enfermo. Paralelamente y sabiendo lo que está en juego, será éste quien le propondrá a su primo, Alexandre de Perigeaux, el engendrar un hijo en Nicolette y salvarla de la ruina; todo esto ignorando que fue justamente él, el amor al que Nicki renunció años atrás por cumplir su deber, destrozándole y destrozándose el corazón.

   Partiré diciendo que me empecé con entusiasmo la lectura y la terminé con sentimientos encontrados. Lo primero ¿me gustó? Sí... pero hay detalles y comparaciones que me son difíciles de ignorar, algunas espero que sólo sean porque es mi segundo libro, y los demás me sorprendan. De partida me encantó la portada -Ok, una nimiedad pero tenía que decirlo- y ya entrando en lectura me encontré con un enganche inmediato, donde la descripción de lugres y momentos, junto a un ritmo fuido y entretenido ayudaron a que éste no se fuera en toda la historia. De la ambientación nada que decir, estuvo a al altura de lo que esperaba encontrar y destaco un pequeño fragmento que les comparto acá:

“Le atrajo la atención el escritorio con la cubierta inclinada y la silla pegada a él. Encima, en hileras muy ordenadas habría unas dos docenas de plumas con el cañón manchado con tinta, de diversos tipos y tamaños. Cogió el cortaplumas con mango de hueso y se pasó la hoja por la mejilla, para evaluar su filo; estaba afilada como para afeitarse. Una hoja de pergamino, en blanco pero con las rayas trazadas, estaba fijada con alfileres al tablero, junto a una tabilla encerada y un estilo.” 

Como lectora amante de letras que soy, me dio cierto placer esta imagen de cómo era el escribir en esos tiempos, además de acordarme que años atrás quise tener una pluma para escribir, jajaja.

    La trama estuvo bien... pero pudo ser mejor. En algunas cosas fue predecible, aunque es de esos casos donde sabes cómo terminarán los personajes, mas no la forma en que llegan a esa situación, y esto último me atrajo. Eché de menos un poco más de acción pero del romance no puedo quejarme, fue sin duda el dueño y señor de la trama... un romance más adulto debo aclarar, porque si, hay flores, mariposas, y un par de momentos no aptos para niños. Otra cosa interesante es que con todo un panorama no tan intrigante por sí solo, sentí cierta tensión por el no saber las decisiones de los personajes, con todo el embrollo y la duda de qué pasaría con la herencia, en especial en la última parte, donde algunos me dieron más de una sorpresa en el clímax. Peero, el final la jodió, dejándome con gusto a poco, así de simple.

    Metiéndome de lleno con los personajes, aquí tengo flores y piedras por igual. Me gustó el desarrollo y las interacciones, ninguna la sentí forzada y en esto destaco las conversaciones de Milo y Alex, donde además se nota la tozudez de uno y la moral del otro frente a un tema delicado. También los detalles referentes a las creencias de la época -como el comentario de Berte de que “hacer ocupaciones de hombres” podía influir en volver estéril a una mujer- fueron unas joyas para imaginarme cómo eran las cosas en esos tiempos. Lástima que ninguno destacó como para considerarlo mi favorito, quizás porque en algunos momentos sentí que se repetían los moldes. Si, aquí va la primera piedra, y es que por dar un ejemplo, de nuevo me encontré con un personaje considerado “loco” por sus ideas adelantadas en las ciencias, por suerte éste fue secundario; pero con el hombre protagonista, tristemente también sentí que se repitió la tónica de un tipo libre, que por x motivo elige no tener familia, famoso por su atractivo con las mujeres, pero con ninguna cae /excepto la protagonista, claro está. Ojalá los siguientes libros me muestren que sólo tuve mala cueva con éstos y no es un falla de la autora. Otro detalle que me hizo ruido, y admito que me hace preguntarme si será algo del género o no, es la manía de que el hombre principal (protagonista, o amor de la protagonista) sea perfecto, físicamente. Y aquí la cosa fue más allá. Alex tiene muchas cicatrices visibles y sin embargo, lejos de afearlo, eso le da, y cito “un matiz de misterio en su belleza”... (y acá agarré mi cojín especial para cabezazos, porque ya me aburrí de sufrir migrañas con la pared)
    Compensando con algunas flores, y aunque no fue un favorito pero sí me hizo reír en cierto modo, destaco al villano, que no es ningún secreto su identidad en la historia, pero fue bien divertido estar en su cabeza y ver cómo planeaba cosas y luego, por gajes de la vida, éstas se iban a water y le daban una urticaria creciente con las páginas. El enredo de las copas fue un total chiste y lo sucedido con el Abad, bueno, admito que ahí hasta sentí un poco de empatía por sus esfuerzos para biocotearle la vida a los protagonistas.

     En suma, fue una lectura entretenida, con hartas páginas que pasaron rápido igual, me gustó pero debo ser honesta: sólo la recomiendo para los románticos declarados, o quienes no busquen algo que te mantenga en ascuas todo el rato. Sino... te aburrirás, qué te voy a decir.
    Sin más, vuelvo a mi rincón para ponerme al día... siempre me ha gustado Diciembre, pero ahora no, la pega se ha vuelto más densa y me quita tiempo de lectura, snif.
¡Feliz lectura para todos!
S.K. Seibert.