martes, 19 de junio de 2018

La Espía de la Corona

Prefiero el nombre original

¿Qué tal amigos?
     Yo me encuentro bien protegida del frío con una estufa mientras escribo, trayendo esta vez a un amigo diferente a lo acostumbrado... algo, bueno, sigue habiendo su cuota de misterio pero sin duda el género reinante aquí es el romance: sin más les presento a La Espía de la Corona, de la estadounidense Patricia Ryan.

     Ambientándonos en la Inglaterra del año 1170, la historia nos muestra a Phillipa de Paris, una joven que gracias a cierta reputación con la que carga, resulta elegida para ser reclutada por el rey Enrique y espiar al diácono Aldous Ewing, sospechoso de traicionar a la Corona. Para ello tendrá de aliado a Hugh de Wexford, con quien trazan un plan que parece perfecto, pero entre sus fallas la principal y menos prevista será la traición de sus propios corazones.

     Bien, bien, partiré hablando de algo que busco y me gusta mucho en estas novelas, y es la ambientación histórica, donde debo reconocer que Ryan acá me dejó más que satisfecha; desde la mala fama que sufre la protagonista por su preferencia a los estudios filosóficos y la soltería, o por recibir en su casa a hombres hasta altas horas de la noche, hasta aspectos más detallados como la forma de referirse al paso de las horas, con palabras como “maitines”, la ambientación es muy rica en detalles, se nota que la autora se informó bien, lo que me ayudó mucho para meterme en la novela y disfrutarla más. La narración en general estuvo bien, fluida y potenció un enganche que sentí desde las primeras páginas, aunque como dato anecdótico diré que hubo un momento que se me hizo eterno... no se, fome no era pero, tardé más en pasar esa escena que en leer lo que vino después. Lo chistoso es que fue justo en la mitad del libro, cual si tuviera que cruzar la media valla para seguir.

    Metiéndome con los personajes, debo decir que acá me gustaron más los villanos. El par protagónico también me gustó, estuvo bien trabajado, sufrí, me reí y enojé con ellos pero admito que hubo algunos detalles que en cierta forma sentí clichés... o sea, la clásica chica que carga con fama de zorra y al final es lo más casta que hay, o el tipo de alma libre que, justo con la protagonista no se le va la “obsesión”... vale, vale, lo sé, su género es el romántico pero en esos detalles no diré que me sorprendieron. Por otro lado ciertos malvados del libro sí lo hicieron, más que nada por su nula humanidad, y para qué lo voy a negar, me encantó haberle achuntado sobre quién estaba detrás de todo ¡ja! Si al final será cierto eso de que los personajes de quién el protagonista sospecha, nunca son al final.

     Con la trama... aaam, diré que hizo honor a su mote descriptivo de “romántica medieval”. Admito que aunque estaba preparada y no tengo nada en contra del romance -el mismo blog prueba que me han encantado novelas del tipo- igual a veces sentí que en el tema de la misión el parcito se quedaba atrás, con los corazones y unicornios. Por suerte en la segunda mitad del libro la acción resucita con bombo y platillos, y en honor a la verdad, hay que decir que ese mismo romance que abundó fue también una pieza clave para liar más las cosas a largo plazo. Lo que sí me pareció una jugada no buena, esta vez fue el mostrar muchas visiones. O sea, en su momento muestran que piensan los villanos... y ahí el misterio de lo que harán se va al diablo. Generalmente me encantan cuando muestran más allá del protagonista, pero acá, no eligieron bien al personaje si la idea era mantener el enigma. Ahora bien, antes que piensen que el clímax se perdió, diré que ciertos personajes salvan eso cuando menos lo esperas... si, yo también pensé que no me iba a sorprender de nada y al final fue un: ¡WTF! Así que sí, el querido clímax con su final salen bien parados en esta ocasión.

    Con corazones y todo fue una novela que disfruté mucho, es Romántica (con mayúsculas), muy bien escrita, con personajes que dejan huella, y que recomiendo especialmente a quienes les guste el género o la literatura de época. Los no románticos, bueno... leerán bajo su propio riesgo. Que sí, también hay acción y misterio, pero si buscas sólo eso, pues mejor ve uno de Sherlock.
Sin más ahora vuelvo a mi rincón... quizás pille algo de terror.
¡Feliz lectura para todos!
S.K. Seibert.

PD: Datos frikis, husmeando por ahí, me enteré que el nombre original de esta novela es “The sun and the moon”, además de la segunda parte de una saga... más puntos a favor, ya que la pude leer sin problemas pese a ignorar la primera parte jajajaja.
Ahora... a ver cómo consigo ese libro... uuum.

1 comentario:

  1. Suena entretenido, ya quiero leerlo, a pesar de sus pequeñas caídas, al parecer es muy bueno. :)

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